Traslado de cadáver de ballena a vertedero genera críticas en la comunidad de Puerto Natales

El pasado viernes se registró el varamiento de una ballena muerta en un muelle de faenas salmoneras en la costa de Puerto Natales. Las autoridades trasladaron el cadáver al vertedero de la ciudad, acción que fue criticada por la comunidad natalina ya que  va en contra de protocolos biológicos y científicos, creencias ancestrales y del ornato de la ciudad.

Por Francisco Lucero

Gran revuelo generó las imágenes viralizadas del traslado de un cadáver de una ballena en las costas del fiordo de Última Esperanza en la Región de Magallanes. En las fotografías es posible observar al cetáceo con parte de su cola cercenada siendo trasladado con maquinaria pesada al vertedero de Puerto Natales. Debido al precipitado traslado al vertedero del mamífero, no hay claridad de cuál fue la causa de su muerte.

Habitantes de la zona aseguran que hace un mes se había visto una ballena de similares características en la zona de Dumestre. Por esta razón descartan la hipótesis de que el deceso haya ocurrido tiempo atrás. En ese sentido, responsabilizan al impacto de alguna embarcación mayor, probablemente ligada a la industria salmonera que está cada vez más presente en la zona de Puerto Natales.

Desde las comunidades Kawésqar criticaron el procedimiento ya que va en contra de sus creencias ancestrales y tradiciones intangibles del pueblo indígena. En una carta dirigida a la delegada presidencial, la alcaldesa de Última Esperanza y al Capitán de Puerto acusaron negligencias en el traslado del cadáver al vertedero. “Creemos que sería necesario y exigimos trasladarla a un canal donde no haya gente cerca, para que ese gran representante de los mares termine su ciclo vital tal cómo debió haber sido, sirviendo a otros seres que pueblan los canales”, aseguraron.

Además, y al igual que otras organizaciones, la comunidad Kawésqar expresó su molestia por las negligencias ante el rápido traslado sin antes una investigación correspondiente. “La actividad industrial y el excesivo tráfico marítimo podrían ser las causas de su deceso, lamentablemente nunca lo sabremos” acusaron en la carta.

A continuación, puedes revisar la carta completa:

Desde la organización Magallanes sin Salmoneras también criticaron el procedimiento por diversas razones. Una de ellas relacionada con el aseo y calidad de vida de los natalinos. Esto debido a que la ballena fue trasladada y enterrada: “En el vertedero municipal, el cual ya vive una situación de emergencia ambiental”. En cuanto a la posibilidad del traslado del cadáver a aguas abiertas destacaron que habría sido la mejor acción ya que permitía seguir el ciclo de vida correspondiente, incluso reclamaron que las osamentas podrían ser útiles para la educación ambiental de la zona.

Las críticas no solo llegaron desde el territorio magallánico. El vocero de Defendamos Chiloé, Juan Carlos Viveros, también repudió el procedimiento realizado por las autoridades. “No puede ser que sea retirada de esta manera a un vertedero sin la necropsia, ni los estudios, ni la investigación que corresponde para determinar las causas de muerte, es por decirlo de alguna manera, una irresponsabilidad, una negligencia, pero también es sospechoso”.

Por su parte, los vecinos de la comunidad también se hicieron presente difundiendo en redes sociales el #Ningunaballenamereceterminarenunvertedero. Diversas casas han colocado carteles con dicha frase en sus ventanas. Incluso el grupo Illapu, quien se presentó en Puerto Natales a raíz del día del trabajador, mostró su rechazo al tratamiento del cadáver y a la creciente industria salmonera en Magallanes que pone en peligro la gran biodiversidad del territorio.

Además de este hecho, durante la última semana se denunciaron otras dos muertes de ballenas en las costas chilenas a raíz de la acción humana. Por un lado, en la comuna de Quintero varó una ballena de bryde, la que presuntamente murió ahogada por mallas de pesca. Por otro lado, desde Caleta Huiro, en la comuna de Corral, acusaron que apareció una ballena jorobada muerta flotando entre elementos utilizados para la pesca.

Industria acuícola en la Patagonia

La industria acuícola y salmonera es una realidad en la Patagonia chilena. Tradicionalmente se ha desarrollado en la Región de Los Lagos. Dicha zona ha sido fuertemente afectada por dicha actividad, generando emergencias ecológicas como la marea roja y disminución de la biodiversidad.

Sin embargo, en los últimos años la industria se ha trasladado más al sur, llegando a la Región de Magallanes, territorio que se consideraba prístino por la casi nula intervención humana. De esta forma los tradicionales fiordos magallánicos, como el de Última Esperanza, se han visto invadidos con infraestructura y barcos de gran tamaño relacionados con las salmoneras.

En este contexto la ONG Oceana ha estudiado la realidad de diversos cetáceos en la zona patagónica del país. De esta forma ha concluido que las ballenas están expuestas en mayor medida a embarcaciones artesanales, pero que su principal amenaza son la flota industrial debido al tamaño y consecuencias de un impacto con dichas embarcaciones mayores. También explican que el ruido de origen humano afecta el comportamiento y las rutas de traslado de ballenas jorobadas, fin y azules.

Juan Carlos Viveros de Defendamos Chiloé, plantea otra arista de la importancia del cuidado de las ballenas relacionadas con la crisis climática que aqueja al planeta, pues colaboran en la disminución del CO2 atmosférico. Se estima que cuando las ballenas de mayor tamaño mueren, se llevan al fondo del mar aproximadamente 33 toneladas de CO2. De esta forma, la protección y el respeto de los ciclos vitales de los cetáceos es vital para combatir la crisis climática.

Por otro lado, desde Magallanes Sin Salmoneras resaltaron las consecuencias negativas de la instalación de la industria acuícola en el territorio austral: “Son conocidos los efectos de los escapes de salmones, especie invasora y carnívora, que terminan depredando a la fauna nativa”, sostuvieron desde la organización.

En cuanto a la responsabilidad institucional declararon que: “Se han hecho varias intervenciones e iniciativas legales, pero la poca exigencia de las autoridades respecto a la instalación de estas empresas, que, además sobrepasan los marcos legales y la poca o casi nula fiscalización”

De esta forma, la actividad industrial que se vive en las costas de la Patagonia chilena es un tema que preocupa a las comunidades, particularmente a las de Magallanes, pues  más al norte tienen la muestra de cómo se afectan y contaminan los territorios luego de la invasión de las salmoneras y otras industrias extractivistas.

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