Coordinadora Penco-Lirquén denuncia excesiva represión y criminalización de sus demandas

El martes pasado el movimiento contra el terminal marítimo de Gas Natural Licuado se manifestó a las a fueras de la comisaría de Lirquen para dar cuenta de la represión y criminalización que se está llevando a cabo en contra de quienes rechazan la construcción de ésta intervención marina que es parte del plan Octopus.Dicha proyecto comprende la instalación de una central termoeléctrica en la localidad de Bulnes, mientras que para Lirquén y Penco significaría la intervención en las costas con un terminal marìtimo de Gas Natural Licuado en conjunto de gasoductos submarinos y subterráneos.

Camila Arraigada, vocera de la coordinadora Penco-Lirquén, declaró que realizaron una velatón a las afueras de la comisaría para evidenciar la situación que estaban viviendo tras la llegada de la empresa Bio Bio Genera.

La empresa habría llegado a la zona para realizar la consulta indígena, ley que dio la Corte Suprema para detener el proyecto pues la entregada no fue dialoga ni aprobada por la comunidad Koñintu Lafquén Mapu .

La población Lafkenche-mapuche que se encuentra cercana al lugar a intervenir fue visitada por la empresa con un gran contingente policial, al igual que lo ha hecho la comisión de evaluación ambiental, así lo señala Rodrigo Dresdnert, periodista que acompaña a los abogados que están en contra del proyecto.

Además, Dresdnert comenta sobre las detenciones realizadas a los estudiantes de Lirquen, quienes han sido actores importantes contra del proyecto Octopus, comentando que se les ha perseguido en busca de coartar su participación desde los liceos y la Municipalidad, como por parte de Carabineros.

Actualmente las comunidades ìndìgenas se encuentran preparando lo que será el We tripantu, razón por la cual no se ha mantenido las conversaciones con la empresa, sin embargo para los estudiantes se abra un nuevo conflicto tras la acusación por daños en los liceos que se encontraban en toma.