Andrés Pérez sigue vivo a 17 años de su muerte

Eran las cinco con cincuenta minutos del 3 de enero del 2001, cuando el conocido actor y director chileno Andrés Pérez dejó el plano terrenal. Su vida se agotó en ese momento, pero su obra y legado resurgió al punto que cada 11 de mayo se celebra el Día Nacional del Teatro, en homenaje a su nacimiento en 1951 en las frías tierras de Punta Arenas.

Pero eso no es todo, cada 3 de enero parte la fiesta del teatro con Santiago a Mil, uno de los festivales de teatro más importantes de Chile que se inaugura a partir de esta efeméride.

Andrés Pérez Araya fue un innovador, eso es sin duda una afirmación que todos en el mundo de la cultura comparten, porque desde la autogestión y esfuerzo llevó el teatro a la calle con el propósito de generar un vínculo entre su trabajo y el proceso creativo de la mano con la ciudadanía.

Brillar con afán

Estudió en Santiago actuación y danza en la Universidad de Chile, siendo destacado entre sus compañeros. Fue un artista multifacético y su versatilidad lo llevó a participar en el cuerpo de baile de la extinta revista Bim Bam Bum, hasta interpretar en teatro montajes de clásicos como Molière, Brech, Shakespeare, Ibsen y Sófocles. Sus pasos lo llevaron a convertirse en Lautaro, a honrar a Violeta Parra a través de la danza y a escribir su primera obra Las del otro lado del río.

Pero la calle fue su mayor debilidad, porque era allí donde ocurría toda la magia. En 1980 fundó el Teatro Urbano Contemporáneo, enfocado cien por ciento al teatro de calle, y después de tres años fundó la compañía Teatro Callejero. Con ambas agrupaciones presentó más de diez obras de este tipo, en contacto directo con las personas, era “belleza gratuita durante una hora y media como acto político”, afirmaba.

Con el paso del tiempo recibió una invitación de la agregada cultural de Francia, allí pasó seis años trabajando con Ariane Mnouchkine y el Thèatre du Soleil (Teatro del Sol). Partió desde abajo, como oyente hasta terminar interpretando a Ghandi en un rol protagónico de la obra La India de sus sueños. Todo el saber que aprendió en esta escuela lo trajo a Chile y con ello esta nueva forma de trabajar con el elenco, en donde los personajes seleccionaban a los actores y no al revés, como es la tradición.

Fundó el Gran Circo Teatro y debutó con éste en 1998 con La Negra Ester, obra autobiográfica del poeta y folclorista chileno Roberto Parra Sandoval.

Foto: Memoria Chilena

Pérez es un artista que se apropió de los espacios públicos para entregar de forma gratuita obras de gran calidad, no por nada el estreno de La Negra Ester, que fue un viernes 9 de diciembre de 1988 en la Plaza O’Higgins de Puente Alto, congregó a 600 personas. Y así fue en las sucesivas presentaciones.

En su tiempo Andrés Pérez contaba a El Mercurio que escoger este lugar se debía a que “una de las motivaciones fundamentales del grupo es descentralizar la cultura y entregarla a las distintas comunas de Santiago”. El montaje ha tenido tal éxito que estuvo en gira por Santiago y diferentes regiones, además de una itinerancia en doce países europeos, además de Estados Unidos, Cuba, Canadá, México, Uruguay y Argentina.

Luego de este aclamado montaje sobre la chilenidad, desarrolló proyectos como El desquite y Nemesio Pelao, ¿qué es lo que te ha pasao?, Popol Vuh, las interpretaciones de Madame de Sade y montajes de óperas y musicales, como su versión de La pérgola de las flores, Época 70: Allende. En la última etapa de su vida se enfocó en proyectos de carácter personal, como La huida.

Vive su legado

Para recordar y homenajear a Andrés Pérez, el Gran Circo Teatro organizó un encuentro que se llevará a cabo este 3 de enero a las 20 hrs, en la que tendrán música, teatro, charlas, humor y circo en el escenario abierto y jam. Esta actividad es en el Gran Circo Teatro, ubicado en Republica 301.

3 de enero, a 17 años de la partida del mago.

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También puedes disfrutar en De la Pérgola a la Negra, un viaje musical entre dos clásicos del teatro musical chileno del siglo XX: La pérgola de las flores (1960), de Isidora Aguirre y del compositor Francisco Flores del Campo, y La negra Ester (1988), de Roberto Parra, adaptada y dirigida por Andrés Pérez con música de La Regia Orquesta, como parte de la programación gratuita del Festival Internacional Santiago a Mil. Las funciones son el 3 de enero en el Teatro Municipal de Santiago (pagada), y de manera gratuita el 4 de enero en Playa Cavancha en Iquique y el 20 de enero nuevamente en Santiago.

©Fundación Teatro a Mil

Foto Principal: Andrés Pérez, foto de Gran Circo Teatro.