El riesgo de los nuevos edificios gigantes en Concepción

El aumento de edificios en Concepción que cuentan con altura libre, llevó a que el pasado lunes diversas organizaciones hicieran una petición a la Contraloría para investigar la legalidad de estas construcciones.

Últimos antecedentes

Desde hace unos años, diversas han sido las controversias que el sector inmobiliario ha traído para la provincia penquista. Una de estas es la creciente proliferación de edificios de altura libre.

Según la experta en crecimiento urbano e investigadora del Centro de Desarrollo Urbano Sustentable, Carolina Rojas, sólo en la última década, Concepción ha crecido más de 6 mil hectáreas urbanas. Mientras, la planificación de la ciudad está siendo muy limitada para enfrentar estos nuevos patrones de expansión. “La expansión se ha dado, básicamente, en un modelo de viviendas familiares de crecimiento horizontal y periférico, lo que ha resultado en una nueva estructura urbana”, escribió la investigadora de CEDEUS.

Por otro lado, en enero de este año, se realizó una consulta ciudadana, la cual mostró en sus resultados una necesidad de reforma al Plan Regulador Comunal percibida por los habitantes Recién este pasado mes de abril se realizó la quinceava reforma al Plan Regulador, luego e una demora del Minvu. Esta reforma permitiría limitar los permisos de construcción para los edificios en altura libre.

Algunas de las consecuencias

Estos edificios en Concepción han provocado no sólo un crecimiento en la producción de residuos y la contaminación, sino también han perjudicado directamente aspectos que parecían casi seguros para los vecinos, por ejemplo, la luz solar.

La escasez de luz solar puede traer complicaciones en diversas aristas, como el mayor uso de gasto eléctrico y también de la calidad de vida humana, teniendo en cuenta que la luz artificial disminuye los niveles de melatonina (hormona necesaria para la regulación del ciclo de sueño). Mientras la luz solar aumenta los niveles de serotonina (hormona que mejora el estado de ánimo). 

Por otro lado, ha habido problemáticas con las características de la nueva configuración de la ciudad, como la hiperconcentración de comercio y servicios en el centro de la ciudad. Esto provoca que todos sus habitantes deban estar viajando a estas zonas, produciendo alto flujo de transporte público y congestión vehicular.

Los cambios que se observan en la cotidianidad respecto al tema de la construcción en la ciudad son distintos. Por ejemplo, cuando se construyen edificios en Concepción, que cuenten con gran magnitud y muy distintos en altura a las edificaciones próximas, comienzan a acaparar el espacio. Así, se inhibe muchas veces la posibilidad de construir cosas de menor altura al costado.

Los edificios de altura consumen gran parte del espacio y no se construye nada más a menos que sean proyectos de la misma empresa o de asociados a la misma. Esta situación genera un deterioro del desarrollo de las ciudades porque se busca el aprovechamiento máximo de las utilidades de un terreno específico.

Las amenazas al patrimonio urbano

¿Qué es el patrimonio urbano? Este se concepto se refiere a las características materiales que conforman la identidad de un lugar. Esta identidad cobra sentido en sus edificios y espacios públicos. Estructuras que con el tiempo, evolucionan y reflejan los cambios sociales.

Al respecto, la UNESCO declara que: «El patrimonio urbano reviste una importancia crucial para nuestras ciudades, ahora y en el futuro. El patrimonio, material e inmaterial, es fuente de cohesión social, factor de diversidad y motor de la creatividad, la innovación y la regeneración urbana». Además, promueven un planteamiento consciente de la gestión de los paisajes urbanos, que logre integrar los objetivos socioeconómicos con la preservación del patrimonio.

El director de Fundación Síntesis y «Muni Ciudadana Concepción«, además de ex-candidato a alcalde, Camilo Riffo se refirió al tema. El urbanista argumentó que desde el plan regulador comunal de Concepción que se aprobó el 2006, se establecía la posibilidad de tener incentivos para la edificación en altura rompiendo el límite establecido.

Lo que forjó el camino para la situación actual, donde existen múltiples edificaciones de gran magnitud. Finalmente, el Plan Regulador juega un importante papel en la posible destrucción del paisaje urbano.

«Hoy ya tenemos una nueva modificación al Plan Regulador, que establece alturas de edificación nuevas. Pero esto va a tardar en materializarse, porque los permisos de edificación rondando en este momento están regidos por el plan anterior, debido a los constantes retrasos que tuvo el municipio y todo lo que tardó en hacer una modificación que debió ser de carácter precautorio. Pero no se hizo y ahora tenemos todos esos permisos establecidos», señaló. 

Además, Riffo reforzó la idea de que el deterioro del patrimonio urbano también va construyendo una ciudad que no tiene un enfoque comunitario. Esto se podría llegar a ver en un barrio o en proyectos de edificación en altura que consideren espacios comunes de encuentro e integración. Sin embargo, como no es el caso, se va desarrollando una ciudad que solo piensa en la individualidad y no en lo colectivo, por lo tanto se rompen las distintas formas de organización barrial o no se fortalecen.

El desgaste del patrimonio urbano es un problema que se presenta en muchos lugares del país, de distinta forma, pero pocas veces es señalado como tal por parte de las autoridades.

La solicitud a Contraloría

El pasado lunes 4 de octubre se le solicitó a la Contraloría que investigue la legalidad de las edificaciones en altura. La concejala Claudia Arriagada preside la comisión de Urbanismo e Infraestructura, donde se formó un equipo técnico con diferentes organizaciones. Algunas de ellas son Modatima BioBío, JJVV Plaza Perú Diagonal, Asamblea Condell, ONG Defensa Ambiental, etc, las cuales llevan años trabajando en la defensa de la ciudad.

Este equipo descubrió que el artículo 40 del Plan Regulador Comunal infringe un artículo de la Ley de Urbanismo y Construcciones, que es el artículo 184. Este habla sobre el aporte al espacio público, cosa que no presuntamente no están haciendo los edificios. Además de las organizaciones sociales, la acción fue respaldada por la concejalía municipal y un consejero regional.

La también integrante de Modatima BioBío, Claudia Arriagada, se refirió a los próximos pasos a seguir. Advirtiendo que se solicitará a la brevedad una reunión con el Contralor, en pos de conversar teniendo en cuenta que debido a los múltiples permisos otorgados, se presumen al menos 50 edificios en Concepción infringiendo la norma anteriormente nombrada. 

«Hay estudios que comprueban que en Concepción hay suelos licuados, por tanto dificultan la construcción en altura. Recordemos lo que pasó el año 2010 con el edificio “Alto Río” que se desplomó completamente. Entonces, nuestra pregunta siempre ha sido: ¿todos los edificios que se han construido en estos últimos 10 años pueden resistir un nuevo terremoto? Teniendo en cuenta que estamos en una zona sísmica y no hay nada que avale que si resistirán. Además, ¿se han hecho estudios de impacto ambiental? Muy pocos edificios han hecho estudios de impacto ambiental, eso está más que averiguado». 

Las organizaciones sociales quedaron a la espera de las respuestas que entregue la Contraloría a la petición. Así como también, de los resultados a largo plazo gracias a las modificaciones del Plan Regulador.

Sin duda, la ciudadanía ha logrado presionar en el avance de este tema y debe seguir haciéndolo, para empezar a mitigar y prevenir daños. Debido a que las inmobiliarias han demostrado con sus acciones, sólo preocuparse de poder sacar el máximo provecho de cada metro cuadrado para sus edificios en Concepción.