“Dibujar el límite”: Las performances de la artista Janet Toro

Dibujar el límite es en la actualidad una de las series más destacadas de esta performista chilena. En este trabajo se problematiza su condición de inmigrante y de mujer. Janet Toro vivió durante 15 años en Colonia, Alemania. Sin embargo, la experiencia fue muy dura para ella.

“Me fui en las peores condiciones, hasta trabajé limpiando en distintos lugares pero eso me hizo muy fuerte. Mi pasión por el arte no disminuyó, aunque tuviera que crear con barro o con las piedras de la calle estaba dispuesta hacerlo. Todo esto hizo que reforzara mis convicciones, a pesar de la discriminación y la pobreza”, explicó Toro.

A lo largo de ese período, investigó y pasó largas horas dibujando sin parar. Esta fue su forma de lidiar con una serie de conflictos sociales, físicos y psicológicos a los que se enfrentó en este país. Puso a prueba su cuerpo y sus propios límites. Muchas veces nubló su vista por pasar arduas horas de trabajo en las que se sometió a un intenso esfuerzo corporal y llegó a completar una acción performática en un día.

La artista jugó con las posibilidades de su corporalidad y con los dibujos, que iban generando un lenguaje radical y trazos orgánicos, muy viscerales.

La exposición reúne parte de estas extensas siete performances que Janet Toro realizó en Colonia, con diversas fotografías y bocetos hechos en distintos estilos. Entre ellos, cabe destacar la línea recta que rayó la autora durante horas en distintas hojas, el bosquejo que realizó sin ver lo que hacía y los trazos que dibujó con la vestimenta de una mujer musulmana.

Las obras tienen como hilo conductor una reflexión en torno a lo efímero de la belleza y la sensualidad, lo blanco y la prostitución. Mientras que otro grupo profundiza respecto de la libertad y la inmigración.

Janet Toro va más allá de la búsqueda de lo bello. Prefiere indagar en el tiempo y su ritmo. De esta manera, plantea una mirada crítica sobre la condición humana y la violencia respecto a una sociedad indolente.

“Quiero plantear un cuestionamiento visual y corporal acerca de la existencia humana en todos sus ámbitos. Desde lo existencial, lo personal, lo social y lo político. Me interesa crear un espacio de resistencia y de poesía, porque todos los artistas tenemos una responsabilidad en este mundo”, señaló la autora.

Toro comentó que ha trabajado mucho en la calle y que éste es el espacio más difícil para hacer performances. Pero también le interesa el espacio institucional.

“Creo que tenemos que hacer nuestros los lugares y empoderarnos. Quiero que esto también sirva para otros artistas, porque actualmente esta forma de hacer arte se ve muy escasa”, sostuvo la creadora.

«Este es mi cuerpo» 

Además de este encuentro, la artista realizó dos performances en el frontis del museo en la que abordó la soberanía del cuerpo de la mujer respecto al aborto en Chile en las tres causales.

“Junto con cuestionar el espacio institucional plantándome frente a la columna semi desnuda, estoy diciendo: esta es mi libertad, mis goces y mis sufrimientos. Aquí nadie puede meter mano, ni los políticos ni los religiosos. Yo decido. Entonces, eso trasciende a través de lo que a la gente le produce por medio de la performance”, observó Janet Toro.

La curadora de la exhibición, Soledad Novoa, expresó que este trabajo tiene de fondo aquello que se ve y lo que no. “En el patriarcado el sentido hegemónico es la visión. Nosotros tendemos a mirar pero no a tocar o degustar. Esto de no ver podríamos entenderlo como una rebelión frente a lo patriarcal, donde el cuerpo femenino es el sujeto y objeto de la mirada”, dijo la gestora.

La curadora destacó que esta exposición ha tenido un buen recibimiento y que ha generado conmoción y emoción en el público. La muestra puede visitarse en el MAC Parque Forestal, de martes a sábado desde las 11:00 a 19:00 horas y el domingo de 11:00 a 18:00. La entrada es liberada.