5 de octubre: Seguir la lucha y no olvidar, no bajar los brazos

Escrito por el octubre 5, 2018

Patricio Aylwin, Eduardo Frei Ruiz-Tagle, Ricardo Lagos, Michelle Bachelet y Sebastián Piñera. Cinco presidentes han pasado por La Moneda, palacio de gobierno que el 11 de septiembre de 1973 a las 11.52 horas se convirtió en uno de los protagonistas del desastre, del momento preciso en que la democracia fue quemada, bombardeada, asesinada de forma sangrienta y sistemática, marcando las condiciones de vida de todos los chilenos y chilenas por 17 años de dictadura.

Pero no fueron 17 años de brazos cruzados, fueron años de lucha, de movilización, de comunidad, de trabajar en clandestinidad, de levantar las voces y alzar cientos de puños en el aire para gritar que «el tirano caerá». Compañeras y compañeros le rugieron en la cara al dictador. Muchas y muchos cayeron en la lucha, a algunos los mataron y los botaron en la calle, a otros se los llevaron para nunca más volver, pero el pueblo jamás dejó de luchar y la consagración de su esfuerzo finalmente tuvo frutos.

El 5 de octubre de 1988 siete millones de personas se volcaron a las urnas después de años de silencio, para dar su opinión en un plebiscito convocado por el Estado, y que podía significar una esperanza que, pese a las inseguridades y complejidades, existía como posibilidad.

Fue casi un mes de franjas televisivas y difusión por panfletos donde los simpatizantes del Sí quisieron convencer de que el “No” significaba retroceso, vandalismo y hambre, y que la democracia representaba un peligro para sociedad. Rostros como Patricia Maldonado, Marcelo Hernández y Katherine Salosny mostraron su mejor sonrisa para mantener a Pinochet al mando, pero no fue suficiente, porque nunca nada ha pesado más que la unión del pueblo, la organización, la comunidad y la sed de justicia.

A las dos de la mañana del 6 de octubre ya era oficial, el subsecretario del Interior, Alberto Cardemil, asume en televisión abierta el triunfo del No, el que fue celebrado por millones de personas en las calles. Felices, entusiastas y llenos de esperanza.

Hoy, a 30 años de ese victorioso hito por la democracia en la historia de Chile, aún quedan deudas pendientes con el pueblo. Aún están intactos los pactos de silencio, los criminales de lesa humanidad  están saliendo libres, aún existen ex centros de detención y tortura abandonados y más de 22.000 víctimas de dictadura no han sido reconocidas como tales. Y lo más indignante: continuamos con la carta de navegación generada en Dictadura…la Constitución de 1980.

Este 5 de octubre llamamos a no olvidar, a no bajar los brazos y conmemoramos a todas y todos quienes se atrevieron y dijeron NO. No es el triunfo de los partidos políticos que traicionaron las esperanzas populares durante los últimos 30 años. Son 30 años del triunfo de millones de mujeres y hombres de pueblo que se atrevieron a expresar su opinión sin miedo.

Comentarios

[No hay estaciones de radio en la base de datos]