Generación de traumas oculares como política de represión

Escrito por el noviembre 10, 2019

Carabineros ha provocado 200 casos de trauma ocular por disparar al rostro de los manifestantes. Este fin de semana el caso de Gustavo Gatica, que recibió balines en sus dos ojos, estremeció a miles y provocó que el gremio de salud denominara una «catástrofe sanitaria».

Según el último informe del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) hay 197 casos de traumas oculares, ya sea por daño severo a sus ojos o perdida total de la visión.  Sin embargo, el Colegio Médico de Chile (COLMED) indica que hay más de 200 personas afectadas.

El caso del estudiante de Psicología, Gustavo Gatica, remeció al gremio de la salud y a miles de personas. Aproximadamente a las 18:00 horas, al rededor de Plaza Italia el joven recibió proyectiles en su rostro por parte de Carabineros. Dos municiones en uno de sus ojos, lo que derivó en traumatismo severo y visión cero en el mismo, y un perdigón en el otro, el que se encuentra en evaluación médica tras una operación.

Estos hechos demuestran que el proceder policial no respeta ningún protocolo pues disparan directamente al cuerpo y rostro de manifestantes. Incluso el vicepresidente nacional del COLMED, Patricio Meza, señaló que esta situación corresponde a una catástrofe en la salud y oftalmología nacional.

«Estamos frente a una catástrofe sanitaria, la cantidad histórica de pacientes que están quedando ciegos de un ojo es tremenda y el caso que vemos -de Gustavo-, que tiene un compromiso grave de sus dos ojos, es un elemento más que nos preocupa y nos produce frustración.»

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Responsabilidad y estado de los traumas oculares

Según el último balance de la Sociedad Chilena de Oftalmología (Sochiof), solo en la Unidad de Trauma Ocular del Hospital Salvador se presentaron 168 pacientes, en su mayoría hombres, con trauma ocular severo durante estas semanas de manifestaciones en la Región Metropolitana.

Por su parte, el presidente del departamento de Derechos Humanos del COLMED, Enrique Morales, declaró que desde hace 17 días han señalado a las autoridades sobre los graves y numerosos casos a nivel nacional.

«Empezamos a denunciar esto cuando habían 29 ojos perdidos, hoy van más de 200 y no se escucha. Hemos tratado de dialogar en todas las formas y nos enfrentamos a una pared que no responde. La responsabilidad de que personas pierdan su visión, sean mutiladas, no solo es del Carabinero que usa un arma y dispara, es de sus superiores y de las autoridades políticas«, apuntó Morales.

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El vicepresidente del gremio realizó un llamado urgente a las autoridades responsables a detener el uso de balines o perdigones de goma por el daño causado en los ojos y visión de las personas.

«Solicitamos que Carabineros deje de hacer tanto daño en los ojos, como lo ha hecho hasta el momento. El nivel de daño es que por lo menos más de 50 de los 200 pacientes, van a requerir el uso de una prótesis ocular porque la destrucción de su órgano no solo hace que pierdan la visión sino que pierden su ojo» apuntó Meza.

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«Gustavo, amigo, el pueblo está contigo»

Este sábado, integrantes de la Universidad Humanismo Cristiano donde Gustavo estudia, sus familiares, conocidos y manifestantes, realizaron una concentración fuera de la Clínica Santa María donde el joven es atendido. Pese a lo pacífico del encuentro, Carabineros nuevamente reprimió con gases lacrimógenos.

Asimismo, Gustavo y su familia recibieron el apoyo de organizaciones como la Corporación Parque por la Paz Villa Grimaldi, que a través de un comunicado oficial señaló que estos casos «hablan de una política sistemática de daño y mutilación hacia quienes hacen efectivo su derecho a manifestarse».

Frente a todo, el círculo cercano del estudiante también dio una declaración donde condenan enérgicamente la violencia desmedida de los uniformados. Además, solicitan resguardar la integridad y privacidad de Gustavo, así como detener la circulación de la foto que evidencia el momento de su agresión.

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