Pobladores de Chonchi demandan a empresa por buque hundido

Continúan los procesos de extracción de las 200 toneladas de salmones en descomposición que dejó el hundimiento del buque salmonero «Seikorgen» de la empresa Camanchaca a las orillas de la costa de Chonchi, procedimiento que comenzó el viernes 3 de noviembre.

Recordemos que la embarcación naufragó el 18 de octubre con 60 mil litros de petróleo. En cuanto a los salmones, el riesgo de una emergencia ambiental es la principal preocupación de los pobladores, ya que el estado de descomposición de los peces los convierte en una amenaza para el ecosistema.

Cabe destacar que los salmones no fueron liberados al momento del accidente porque no son una especie típica.

El coordinador de campaña de Greenpeace, Mauricio Ceballos, aseguró que de momento no hubo ningún derrame de desechos al mar, pero que el riesgo de que esto ocurra no cesa.

Por otro lado, Ceballos afirmó que desde Sernapesca saben que las multas que pueden tomar en estas situaciones no son suficientemente duras con las empresas.

Por su parte, la pobladora de Chonchi, Patricia Cárdenas manifestó que para ella la empresa Camanchaca no tiene interés alguno en saber cómo esta situación afecta a los pobladores de la zona.

Del mismo modo, Cárdenas se refirió a las acciones y medidas que han tomado las autoridades de Sernapesca desde el accidente de la embaración.

Asimismo, el abogado que representa a la comunidad, Yerko Triviño, especificó cuánto tiempo se espera que demore este proceso de extracción de los desechos que aún se encuentran al interior del barco.

Dicho proceso comenzó el día viernes 3 de noviembre, y fue el pasado martes que se dio inicio a la extracción como tal ya que requería de cuatro días de preparación según lo estipulado. Para que este procedimiento se lleve a cabo sin poner en riesgo la fauna marina ni la salud de las personas se cuenta con la ayuda de profesionales de Estados Unidos, Holanda e Inglaterra.

Pasado el tiempo de extracción comienza la última fase, que consiste en la remoción del petróleo y, finalmente, el reflotamiento y retiro de la embarcación.

Por otra parte, Triviño aclaró que son varias las responsabilidades por las que tiene que responder la empresa Camanchaca.

También han comenzado procedimientos ante Sernapesca por incumplimientos de la empresa tales como la falta de avisos una vez que se hundió el buque salmonero, y otro más por no retirar los desechos dentro de las 48 horas estipuladas para estas situaciones.

Igualmente, comenzaron un procedimiento ante la Superintendencia de Medio Ambiente por dos denuncias, primero por la contaminación provocada y las dificultades que esto significa para las familias de pescadores artesanales, y la segunda por los mismos incumplimientos presentados a Sernapesca, esto con la intención de que se le revoque la concesión a la empresa.

Por último, buscarán conseguir un resarcimiento económico para todos los afectados por la restricción a la pesca en un radio de cuatro kilómetros que rige en la zona por un tiempo indeterminado.