Piñera le da la espalda al medio ambiente y no firma acuerdo de Escazú

Escrito por el septiembre 27, 2018

A pesar de que en su discurso ante las Naciones Unidas Piñera afirmó que incorporará «políticas de cuidado del medio ambiente», se negó a firmar el tratado más importante de los últimos veinte años respecto a este tema.

En medio de la crisis socio ambiental en Quintero y Puchuncaví, más de 200 organizaciones dedicadas a la defensa del medio ambiente y los derechos humanos, junto al apoyo de dos mil personas que sumaron su firma, criticaron a través de una carta y un punto de prensa la decisión del Gobierno de postergar la firma del acuerdo de Escazú.

El acuerdo regional, catalogado como uno de los más importantes de las últimas dos décadas en temas de protección del medio ambiente, iba a ser firmado en el marco de la Asamblea General de las Naciones Unidas, pero el Ejecutivo decidió dar una paso atrás en este tema.

La presidenta de Comité Pro-Defensa de la Flora y Fauna (Codeff), Ximena Salinas, afirmó que la firma de la carta por parte de las organizaciones es una señal clara de la postura de la ciudadanía ante las preocupantes acciones del Gobierno.

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La diputada de Revolución Democrática, Catalina Pérez, presidenta de la Comisión de Medio Ambiente de la Cámara, sostuvo que la decisión del Ejecutivo es contradictorio ya que los ejes que promueve el acuerdo de Escazú son supuestamente los que Piñera ha dicho que tendrá la reforma al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental

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Ana Piquer, directora ejecutiva de Amnistía Internacional Chile, recordó que el tratado también reconoce derechos humanos básicos, «dándole una especificidad a temas medioambientales, en un contexto mundial donde es un asunto de urgencia».

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La coordinadora del programa Ciudadanía e Interculturalidad del Observatorio Ciudadano, Paulina Acevedo, dijo que en el marco del Plan Araucanía, el acuerdo es importante ya que reconoce el derecho a la consulta a pueblos indígenas.

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El acuerdo de Escazú, que fue promovido en gran medida por Chile en sus inicios el 2012, es un tratado vinculante que la mañana de este jueves fue firmado por doce países y establece nuevas normas que buscan defender el acceso a la información, la participación pública y el acceso a la justicia en temas medio ambientales. El Gobierno aún no le ha dado explicaciones al país de porqué decidió no firmar el documento.

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