Magally Ávila, de Madres y Padres movilizados: «La nueva rectora del Instituto Nacional puede causar bastante daño»

Este miércoles fue designada como rectora interina del Instituto Nacional la ex seremi de Educación de la Región Metropolitana, Lilí Orell, a quien involucraron por despidos injustificados y persecución a funcionarios. Ante esta situación, Radio JGM conversó con la integrante de Madres y Padres Movilizados en Defensa de la Educación Pública, Magally Ávila.

Foto: Radio UChile

Tras meses de constante violencia policial y mala administración de la Municipalidad de Santiago, este miércoles fue designada Lilí Orell Padilla como rectora interina del Instituto Nacional hasta marzo del próximo año.

Lilí Orell fue seremi de Educación metropolitana en el primer Gobierno de Sebastián Piñera, marcado por las movilizaciones del 2011, y reemplazará momentáneamente a Fernando Soto, quien este viernes dejó la administración del emblemático establecimiento después de cinco años.

A la espera del concurso público para escoger a una nueva rectoría, Lilian Vincent, actual rectora del Liceo Darío Salas, fue señalada como uno de los posibles nombres para asumir en marzo, quien ha sido fuertemente criticada por los y las estudiantes debido a las 43 expulsiones que ha realizado en su estadía como rectora del Darío Salas y el Liceo Manuel Barros Borgoño.

Para profundizar más en este cambio en la administración del Instituto Nacional, Radio JGM conversó con la integrante de Madres y Padres Movilizados en Defensa de la Educación Pública, Magally Ávila.

¿Qué te parece la designación de una rectora interina en el Instituto Nacional?

Era uno de los nombres que se estaban manejando y, realmente, desde que supimos quién era, empezaron las señales de alerta. Es una funcionaria que durante el primer Gobierno de Piñera no fue de lo mejor. Provocó un ambiente de terror entre sus subalternos y se manejó con violencia. De hecho, a ella la involucraron en un tema que lo denominan «Caravana de la Muerte»: Despidos injustificados y persecución a funcionarios.

Ese tipo de personas, que en el 2010 tenía ese perfil, nueve años después, creemos que tiene que haber acentuado esas malas prácticas, y nos parece algo muy peligroso para el clima escolar, para hacer comunidad y para trabajar en pos de acabar con la situación de hostigamiento que están viviendo los estudiantes en el Instituto Nacional. De todas las malas que podían llegar, quizá es la peor.

¿Crees que este cambio en rectoría tendrá algún efecto positivo en la situación que vive actualmente el Instituto Nacional o más bien es una forma de control del Municipio?

No es la primera vez que el Instituto Nacional tiene una rectoría interina. No tengo entendido muy bien qué pasó en este caso, si hubo un concurso o se declaró desierto, porque el señor (Soto) que está saliendo iba a cumplir su tiempo, por lo que se supone que el Municipio tenía que hacer un concurso, y en ese concurso se debió escoger personas idóneas, que sean educadores, que ojalá sean de la comunidad como lo vienen reclamando hace años los estudiantes del Instituto Nacional, quienes han trabajado en protocolos para tener una mejor administración. Todo lo que los estudiantes, generación tras generación, en comunidad con los apoderados y apoderadas, profesores y profesoras, se echa a la basura por la gestión del alcalde Alessandri, que también demuestra una incapacidad para manejar la situación.

Esto no va a mejorar porque, como es interina, hay muchas situaciones que ella no resolverá. Simplemente es tener una cabeza que medianamente controle, y con los antecedentes que ella tiene, su control lo ejerce a través de la violencia, y los estudiantes han vivido y han estado bajo mucha presión y violencia, externa e interna. Ahora ponen a la cabeza a una persona conocida por traer un ambiente de terror, entonces no espero nada bueno. Lamentablemente, este Gobierno ha puesto su centro de atención en el Instituto Nacional porque es el colegio más antiguo y grande. Si cae el Instituto Nacional, los demás serán mucho más fáciles de poder acabar y derrumbar. La intención de este Gobierno es acabar con la educación pública. Lamentablemente, esta rectora, por más interina que sea, puede causar bastante daño desde esa posición.

¿Qué opinas de que exista la posibilidad de que Lilian Vincent, actual rectora del Darío Salas, pueda asumir el cargo en marzo del próximo año?

Estos cargos deberían de ser por Alta Dirección Pública, deberían de respetarse los perfiles, las exigencias y no ser cargos que tengan que ser puestos a dedo a gusto de cada administración. Lamentablemente, eso estamos viendo en todas las últimas designaciones de dirección y rectorías en los colegios públicos.

Lilian Vincent, que también tiene una actitud de mucha violencia, no es la persona mejor calificada. Es una persona que no debería estar en ningún establecimiento público. No debería tener relaciones con ningún niño o adolescente. Ojalá estos puestos también sean evaluados psicológicamente porque su perfil denota bastante desequilibrio.

Nosotros exigimos que el alcalde y el Gobierno central asuman que no pueden poner a cualquier persona o alguna persona más cercana a su posición política a cargo de los colegios. Los colegios, y con mayor razón, los colegios públicos, tienen que estar a cargo de los y las mejores profesionales. Hay mucha gente que tiene un excelente curriculum y un excelente desempeño, pero no son del gusto de la administración municipal, entonces son descartadas. Queremos que se cumplan todos los protocolos para tener a las personas que mejor gestionen la administración de los establecimientos públicos.

¿Crees que esta situación refleja la despreocupación en general del Gobierno de Piñera por la educación pública, no sólo en Santiago, sino que en otras regiones del país?

Yo diría que no es una despreocupación, es una preocupación y ocupación que tiene este actual Gobierno de Sebastián Piñera para echar abajo la educación pública. Ellos se han enfocado en esto, en echar abajo la educación pública. Empezaron con un abandono en cuanto a infraestructura. Pero el objetivo, que cada vez está más claro para todas las organizaciones que participamos en el movimiento en defensa de la educación pública, coincide en que lo que quiere Sebastián Piñera es sepultar la educación pública.

Puedes escuchar aquí la entrevista completa: