La falta de garantías de derechos humanos en el proyecto de Ley de Migración

Especialistas y organizaciones migrantes y pro migrantes han criticado al proyecto de Ley de Migración y Extranjería que entró en discusión esta semana en el Senado. Apuntan a la falta de pisos mínimos en materia de derechos humanos.

“El Gobierno ha conservado una postura de populismo punitivo al mantener una agenda comunicacional muy marcada por la criminalización de las migraciones y que, finalmente, ha desconocido inclusive elementos fundamentales del enfoque de derechos humanos y del compromiso que tiene el Estado de Chile en materia de derechos humanos”.

Esto declaró la dirigenta del Colectivo Sin Fronteras, Patricia Loredo, respecto al criticado proyecto de Ley de Migración y Extranjería impulsado por el Gobierno de Sebastián Piñera. Junto a ella, cerca de 300 organizaciones y personas migrantes y pro migrantes han mostrado su rechazo al avance de esta iniciativa que, desde su perspectiva, no garantiza la protección de los derechos humanos de la población migrante.

Si bien desde estas agrupaciones han hecho un llamado a cambiar la normativa vigente creada en dictadura que se traduce en el decreto ley de 1975, bajo la lógica de seguridad nacional y la Ley de Seguridad del Estado, han señalado que el diseño de esta nueva iniciativa se basa en políticas restrictivas que atentan contra los tratados internacionales ratificados por Chile respecto a derechos humanos.

Para Patricia Loredo, este proyecto agudizará problemáticas sociales que ya están en una situación crítica, especialmente relacionadas a la exclusión del sistema de protección social para la población migrante.

Además, indicó que no se ha tomado en cuenta la opinión y trabajo realizado por organizaciones migrantes durante la discusión del proyecto de ley.

“En base a esta omisión o restricción de la participación de la sociedad civil, es que estamos observando ahora que el proyecto de ley tiene carencias fundamentales».

«No solo lo decimos nosotros, sino que también organismos internacionales que han puesto el acento en que este proyecto necesita mayor discusión y debate para poder incorporar de mejor manera las garantías de derechos humanos para niños y niñas en situación de migración y para distintos grupos de migrantes”.
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La terquedad del Gobierno y las fallas en el proyecto

Por su parte, la coordinadora del equipo de Migración y Refugio de Amnistía Internacional, Florencia Moral, apuntó a la intransigencia del Gobierno a la hora de discutir aspectos claves dentro de la iniciativa y la excesiva rapidez que ha puesto el ejecutivo para que se tramite el proyecto.

“Lamentablemente, creemos que las autoridades de Gobierno parecen no haber escuchado realmente (a las organizaciones de la sociedad civil). En esto es donde se revela la poca voluntad del Gobierno de someter a debate democrático puntos cruciales del proyecto de ley, porque de otra forma no nos encontraríamos ante su férrea negativa».

«Por ejemplo, a introducir mecanismos de regularización migratoria, la consagración expresa del principio de no devolución, el brindar una especial protección a niños, niñas y adolescentes y mujeres víctimas de violencia de género, y en resumen, la adopción de una verdadera lógica de derechos humanos en la ley”, indicó.
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En tanto, la directora de la Clínica Jurídica para Migrantes de la Universidad Diego Portales, Francisca Vargas, sostuvo que este proyecto se está legislando bajo un ideal del Gobierno que no corresponde a la situación migratoria actual, lo que dejará a la población migrante en una situación de desprotección.

“Una ley de migraciones tiene que hacerse cargo de la realidad migratoria y los tipos de flujo migratorios que vienen al país, de manera tal de poder proteger los derechos humanos de las personas y lograr una verdadera regulación migratoria para promover la regularización de las personas extranjeras».

«El proyecto de ley de migraciones, tal y como está  hoy, promueve absolutamente lo contrario (…) En la práctica, la evidencia y la literatura demuestra que esos tipos de visado o las maneras en que está presentada cierta normativa en el proyecto de ley, promueve precisamente lo contrario a los objetivos que ellos y ellas quieren conseguir”.
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Una ley de migraciones tiene que hacerse cargo de la realidad migratoria y los tipos de flujo migratorios que vienen al país.

Discusión en el Senado

El miércoles 19 de agosto se inició la discusión en el Senado sobre el proyecto de Ley de Migración y Extranjería, que será votado la próxima semana. La iniciativa fue presentada el 2013 en el primer Gobierno de Sebastián Piñera y el oficialismo espera que se tramite con la mayor rapidez posible, sin tomar en cuenta lo indicado por especialistas, organizaciones y personas migrantes y pro migrantes.

Mientras tanto las voces en contra de este proyecto van incrementando. Desde la Cátedra de Racismos y Migraciones Contemporáneas de la Vicerrectoría de Extensión y Comunicación (Vexcom) de la Universidad de Chile, se enfatizó en la columna de opinión de Ximena Poo y Fernando Campos que «el gobierno de Chile está muy atrás de los países que consideran que la migración debe asumirse desde una perspectiva humanitaria de “orden, seguridad y regularidad”.