Femicidios no disminuyen: «con la institucionalidad que tenemos los agresores sienten la impunidad»

Escrito por el abril 16, 2019

Tras el último caso de femicidio ocurrido en la región del Ñuble, la Red Chilena contra la Violencia recalcó que la legislación actual no considera la violencia machista  como un delito, que el Estado está en deuda con las mujeres en Chile y si no se cambia la institucionalidad estas agresiones seguirán ocurriendo.

El caso N°16 de femicidio en lo que va del año se perpetuó en la región del Ñuble. El pasado viernes, Samuel de la Cruz Fuentealba Valdevenito asesinó a su pareja, con quien además tenía una hija de dos años. El mediodía de este lunes fue formalizado y se dictó prisión preventiva para el agresor.

Respecto a la mantención de esta forma de violencia, la JGM conversó con la vocera de la Red Chilena contra la Violencia hacia las Mujeres, Lorena Astudillo, para comprender el rol del Estado en la materia, las causas de estas agresiones y el panorama legal actual.

Considerando los 16 casos de femicidios en la que va del año ¿qué está pasando con los agresores que quedan en libertad y con las penas mínimas que les atribuyen?

Se debe a que la violencia hacia las mujeres no está tipificada en Chile. Primero, no tenemos a una legislación que permita dejarlos detenidos ni que su agresión se considere como un delito. Lo que se hace es juzgar la violencia intrafamiliar para sancionar la violencia que viven las mujeres en el contexto de pareja, pero la este tipo de violencia es considerada una falta solamente. No se le ha dado la gravedad que tiene, entonces al ser una falta y tener penas tan bajas, no cumple con los requisitos para dejar a los agresores en prisión preventiva.

Frente a este escenario ¿cuál es el rol que debería tener el Estado para resguardar a las mujeres?

El Estado debe garantizar la seguridad y tranquilidad de todas las personas que vivimos aquí y no lo está haciendo. Más de la mitad de la población nos vemos afectada diariamente con diversas manifestaciones de violencia. Los distintos gobiernos que han dirigido el Estado chileno usan mucho la violencia hacia las mujeres como un eslogan para candidatearse, pero a la hora de ejecutar políticas públicas, hacer legislación, de poner recursos en prevenir la violencia hacia las mujeres, de sancionarla y repararla, les llega hasta ahí el discurso. Por lo tanto, no solamente ha sido negligente, está en deuda.

Para contextualizar ¿qué proyectos de ley o iniciativas públicas se están discutiendo en pos de solucionar esta deuda?

Para solucionar el vacío institucional ninguna. Lo que se está haciendo es discutir diversos proyectos de ley que vienen a sancionar la violencia una vez que ya la hemos vivido. Así está discutiéndose todavía una ley integral por una vida libre de violencia, la violencia en el pololeo, pero todas esas legislaciones son punitivas lo que significa que el Estado chileno va a permitir que seamos violentadas y una vez que ocurra va a sancionar a los agresores. Lo que queremos y lo que debiera ser, es no permitir ningún tipo de agresiones y para eso necesitamos otro tipo de legislación, medidas educativas, una educación no sexista. Necesitamos que no ocurra y que si llega a ocurrir, sea sancionado.

Según tu visión como vocera de la Red, ¿cuál crees que es la causa de la no disminución de la violencia hacia la mujer pese a la fuerza del movimiento feminista y de la concientización que este ha generado?

Las mujeres estamos saliendo a la calle, el movimiento feminista se está haciendo notar y es por eso que también las mujeres hemos generado conciencia y estamos cambiando nuestras maneras de relacionarnos. Pero mientras la institucionalidad siga mirando que las mujeres nos estamos organizando, algo estamos influyendo, pero el cambio tiene que ser más drástico.

Definitivamente, con la institucionalidad que tenemos los agresores sienten la impunidad. Por algo se van a entregar a los tribunales, pero quedan libres, se toman sus selfies, hacen burla de esto y eso lo ven los demás agresores. Las mujeres le estamos dando la gravedad que tiene, pero ellos quedan libres y no pasa absolutamente nada. Ese sentir que tienen permiso para hacer lo que quieran, es lo que hace que la violencia no disminuya.

Puedes escuchar la entrevista completa realizada en el Noticiero Ciudadano a continuación:

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