Femicida Nicolás Zepeda: Impunidad en la justicia chilena

El martes pasado, la justicia francesa condenó a Nicolás Zepeda por el asesinato de su ex pareja de origen japonés, Narumi Kurosaki. Zepeda deberá cumplir 28 años de presidio en Francia, sus bienes serán embargados y tendrá que pagar una indemnización a la familia y novio de la víctima. Este caso, de relevancia internacional, fue archivado por la justicia chilena en 2017.

Por Gillariet Sánchez y Javiera Órdenes

Luego de más de cinco años sin justicia, el tribunal de Besanzón (Francia) condenó al chileno Nicolás Zepeda a 28 años de cárcel por el crimen de su expareja Narumi Kurosaki, a quien hizo desaparecer en 2016 y cuyo cuerpo jamás fue encontrado.

Si bien el fiscal general buscaba que Zepeda fuera condenado a cadena perpetua, 28 años de cárcel se considera una condena alta en el sistema de justicia francés. Los abogados del chileno tuvieron 10 días para apelar al veredicto y ya anunciaron que solicitarán un nuevo juicio, que se concretará entre 2023 y 2024.

En medio de la lectura de la decisión del jurado, la madre de Narumi, Taeko Kurosaki, mostró una foto de su hija, conmoviendo a todos los presentes. Según el fiscal Étienne Manteux, Zepeda habría arrojado el cuerpo de la joven al río Doubs, que forma la frontera entre Francia y Suiza.

¿Qué ocurrirá ahora?

El juicio oral contra Zepeda, que inició el pasado 29 de marzo, determinó que el chileno actuó con premeditación en el crimen. Se presentaron pruebas que probaron que Narumi recibió amenazas de muerte por parte de su ex pareja, además de compras que inculpan a Zepeda como el responsable de desaparecer posteriormente el cuerpo de la joven.

Nicolás Zepeda cumplirá su condena en Francia, y una vez terminada, será expulsado del país europeo. Además, las autoridades francesas harán captura de todos los bienes que Zepeda posee en dicho país y este deberá pagar una cifra estimada de 180 mil euros, equivalentes a cerca de 150 millones de pesos chilenos, como indemnización a la familia Kurosaki, además de una indemnización extra al novio de Narumi.

Cronología y actuar de la justicia Chilena

En 2017, poco después de haberse confirmado la desaparición de Narumi Kurosaki, Zepeda se encontraba en Chile. Un año después, pese a ser el único sospechoso en las investigaciones efectuadas en Francia, las autoridades chilenas archivaron la causa debido a que el país europeo no presentó una solicitud de extradición en su contra.

El 25 de abril de 2019, la justicia francesa anunció la posibilidad de solicitar la extradición del acusado y el cuatro de diciembre se formalizó dicha petición. Ocho días después, la Corte Suprema citó a Zepeda para informarle de la orden requerida por los tribunales de Francia. Sin embargo, la audiencia se aplazó para el 22 de enero de 2020, a petición de la fiscalía.

Luego de dos meses y tras apelaciones emitidas por la defensa de Zepeda, alegando que las pruebas presentadas no eran suficientes, el 18 de mayo la Corte Suprema admitió la solicitud de extradición. No obstante, rechazó la petición de prisión preventiva y mantuvo la medida cautelar de arraigo nacional y firma semanal ante Carabineros. 

Finalmente y un mes después, la Corte Suprema admitió el requerimiento del Ministerio Público y decretó arresto domiciliario para el imputado, con la finalidad de que este pudiese realizar una cuarentena y cumplir con los protocolos de bioseguridad por la pandemia del covid-19, previo a su extradición pautada para el 22 de julio de 2020.

Existe la posibilidad de que, una vez cumpla la mitad de su condena en Francia, la defensa solicite el traslado de Zepeda a Chile para culminar su pena y pedir libertad condicional, pero esto no es del todo exacto. Para la justicia nacional este hecho corresponde a un delito vigente y sin prescripción, por lo que si bien Nicolás Zepeda podría culminar su condena en el país, el juez podría ordenar la privación de libertad total a cumplirse en prisión.