Emergencia Ambiental en Antofagasta revive discusión por vertedero ilegal en La Chimba

Las quemas ilegales en el vertedero La Chimba no son novedad en la ciudad de Antofagasta. Sin embargo, esta vez la situación alertó a las máximas autoridades sanitarias y ambientales del país por un incendio que inició el 5 de junio en el lugar y que se expandió por 16 hectáreas. El hecho provocó que la ciudad alcanzara niveles dañinos en la calidad de su aire y la consecuente declaración del estado de emergencia ambiental. Los habitantes aledaños al lugar denuncian que no se les ha dado solución a esta problemática que afecta la calidad de sus vidas.

Por Karina González

El vertedero La Chimba es el lugar donde por más de 50 años han llegado los residuos de los más de 360 mil habitantes de la ciudad de Antofagasta. En el informe de la Comisión Especial Investigadora de actos relacionados con el problema ambiental y sanitario de la Cámara de Diputados y Diputadas realizado en abril del 2020 indicaron que el lugar no cuenta con permiso sanitario para funcionar. 

Esta negligencia permitió que toda clase de residuos, no solo domiciliarios, también residuos de la Construcción (Rescon), fueran dejados en el terreno, sin fiscalización. 

El basural ha sido considerado un peligro sanitario en reiteradas ocasiones. De hecho, en el informe de la misma comisión investigadora, especificaron que desde el 2015 a la fecha ha aumentado la lista de sumarios que han presentado los distintos Seremis de Salud por su funcionamiento ilegal. Sin embargo, tampoco esto ha representado una solución. 

Ni siquiera la inauguración del nuevo vertedero “Chaqueta Blanca” en la ciudad de Antofagasta, significó el cierre del vertedero “La Chimba”. 

De hecho, en el informe expresaron que “hoy (abril, 2020) cuentan con una alternativa, con la que hace tres años no contaban. Esta es una buena noticia, pero hay que usar todas las energías para que Chaqueta Blanca, que cuenta con todas las resoluciones, con todas las autorizaciones, funcione. Y La Chimba cierre”, versó el documento.

A pesar que la solución a esta problemática ha sido mencionada en diversas promesas de campaña, lo cierto es que hasta ahora, ningún plan o proyecto presentado se ha hecho cargo de la urgencia de fiscalizar y erradicar el ilegítimo lugar. En consecuencia, las quemas ilegales no le dan tregua a la salud de los vecinos y vecinas del sector. 

Vertedero La Chimba: el “grito de auxilio” de una comunidad

A menos de 500 metros del basural se construyó un condominio de viviendas sociales Desierto Florido, que en noviembre pasado se entregó a sus propietarios. La tesorera de la comunidad, Lisset Fuentes, alertó de la situación antes de llegar a vivir al lugar.

La dirigenta declaró que como comunidad agotaron todas las instancias para ser escuchados y acusó negligencia municipal. Ya que, “el municipio no se hace responsable y no hay nada concreto. Aquí las quemas de basura son día y noche y nosotros pedimos fiscalización con urgencia. Es imposible que nadie sepa quién está prendiendo el fuego”, deslizó.

La misma comunidad interpuso en marzo de este año un recurso de protección ante la Corte de Apelaciones de Antofagasta dirigido en contra de la municipalidad a la que, acusaron de omisión arbitraria de funciones por su inacción ante el funcionamiento ilegal del vertedero. 

Dicho recurso fue rechazado por la Corte de Apelaciones debido a que las pruebas que presentó la Municipalidad de Antofagasta fueron consideradas suficientes para eludir la responsabilidad de ésta frente a las peticiones del vecindario,  las que la tesorera describió como “un grito de auxilio”.

En el documento de causa de la apelación, la Municipalidad de Antofagasta argumentó que “los incendios que afectan a los recurrentes (vecinos y vecinas del condominio Desierto Florido) no se producen en el ex vertedero, sino que en inmuebles colindantes, caminos y otros lugares que no son de administración municipal”. 

Por otra parte, la Corte de Apelaciones se refirió al tipo de propiedad del recinto y la nula participación de los dueños durante el proceso judicial. “La municipalidad indica que los residuos están en predios privados y del Fisco quienes no han sido emplazados en esta causa” (sic).

Municipio anuncia solución y luego retrocede

Anteriormente, en julio del 2021 el alcalde Jonathan Velásquez (Evopoli hasta 2019; hoy independiente) decidió no renovar la concesión del terreno del vertedero La Chimba con Bienes Nacionales. Con este gesto, se desligó de la responsabilidad de mantener el área. 

Sin embargo, en septiembre del 2021 el Consejo Regional (Core) aprobó entregar la concesión del terreno desde Bienes Nacionales al municipio. Esto con el fin “única y exclusivamente para desarrollar el proyecto denominado: Plan de Remediación y Recuperación del ex vertedero La Chimba y su entorno”. Planificación que hasta la fecha no ha ocurrido.

El plan de Remediación y Recuperación fue presentado en agosto de 2016 durante la administración de la ex alcaldesa, y hoy prófuga de la justicia, Karen Rojo, quien presentó el proyecto a la comunidad con un financiamiento de $200 millones desde la Subsecretaría de Desarrollo Regional y Administrativo.

El objetivo, según se señaló en el proyecto era convertir el terreno en un área verde con un parque urbano dividido en varios sectores, entretención familiar, deporte y un área cívico-cultural. 

No obstante, en 2018 la misma autoridad retiró aquella solicitud, argumentando que se debían corregir ciertas observaciones. Esta planificación representaba la solución tan anhelada para los vecinos y vecinas de La Chimba.

Alerta ambiental en vertedero La Chimba

El pasado 5 de junio comenzó un incendio que afectó a 16 hectáreas, obligando a las autoridades a declarar Emergencia Ambiental. El fuego, el cual se habría iniciado por las quemas ilegales que se acostumbran a realizar en el basural, ardió por aproximadamente tres días. 

La declaración de Emergencia Ambiental, para Lisset Fuentes, dirigenta del condominio aledaño al basural significó que “acá le están bajando mucho el perfil. La gente cree que la alerta amarilla era por la gran quema, pero no. Acá están emanando gases tóxicos y nadie se hace responsable, se ponen a pelear entre ellos por quién figura más”.  

La emanación del humo tóxico preocupó a las comunidades aledañas por una posible una merma en su salud. A esto se suma la proliferación de plagas de ratones, insectos y moscas con las que deben lidiar las más de 40 mil familias del sector norte de Antofagasta. 

 Nuevo sumario y una promesa incumplida

A raíz de lo anterior, la Seremi de Salud de Antofagasta, Jéssica Bravo Rodríguez, inició un nuevo sumario sanitario en contra de la Municipalidad de Antofagasta. En el se argumentó que “el recinto no cumple con condiciones para operar como relleno sanitario. Ello puesto que no cuenta con Autorización Sanitaria de Funcionamiento ni Resolución de Calificación Ambiental”.  A aquel sumario, la municipalidad debe dar respuesta el próximo 17 de junio.

Para el activista socioambiental y consejero regional, Fabián Ossandón, la acción de la seremía no representa novedad. “La determinación de la autoridad sanitaria no es algo nuevo. Hemos visto un montón de multas cursadas al municipio y lamentablemente no pasa por ahí la solución que hoy estamos buscando”, explicó.

Ossandón, quien ha acompañado a los vecinos y vecinas del sector norte de la ciudad en su lucha contra el vertedero, es también parte de la Comisión de Salud y Medioambiente del Consejo Regional. Dicho órgano en mayo del 2022 aprobó  más de 1.700 millones en inversión del Gobierno Regional para el plan de Limpieza de La Chimba. 

Para su aprobación, el municipio de Antofagasta debió firmar una carta en que se comprometió, entre otras cosas, a realizar las ejecuciones para el cierre del basural; implementar el Plan de Remediación y reforzar la fiscalización y seguridad municipal en el recinto.

Al respecto, el presidente la Comisión de Salud y Medioambiente, y consejero regional, Víctor Guzmán, valoró la firma del municipio en este compromiso. Sin embargo, señaló que este compromiso no se ha cumplido. 

En ese sentido, Guzmán llamó al Concejo Municipal a hacerse parte de la fiscalización. “Por lo mismo nosotros le pedimos a los concejales que nos ayudaran con la labor de fiscalizar los cumplimientos de estos acuerdos. De igual forma nos reuniremos el próximo 4 de julio para revisar avances”, adelantó. 

Mientras eso no ocurre, las familias que habitan alrededor del basural La Chimba continuarán respirando aire tóxico y luchando para que su vida resista a las plagas de ratones, arañas, moscas e insectos. A todo esto, y a más, tendrán que seguir enfrentándose hasta que las autoridades entiendan y reconozcan que lo que está entre la basura y el poder son las vidas de miles de personas.

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