Proyecto inmobiliario amenaza 13 hectáreas de bosque nativo en Peñalolén
Escrito por Agustin Alvarado el septiembre 2, 2020
Desde 2014 las comunidades del sector alto Peñalolén se han visto alertadas por el avance de un proyecto que pretende barrer con trece hectáreas de bosque. En este escenario, los vecinos acusan a las autoridades de no dimensionar este daño irreparable.
Luego del retorno a los trabajos de la Inmobiliaria Pocuro en la zona de alto Peñalolén, vecinos denuncian la inminente destrucción de 13 hectáreas de bosque nativo. El proyecto «Lomas de Peñalolén«, consiste en la construcción de más de doscientas viviendas, justo a un lado del Parque Quebrada de Macul.
El regreso de la construcción llegó luego de que en julio la Corte Suprema ratificara la decisión de la Corte de Apelaciones de rechazar un recurso de protección interpuesto por las comunidades de la zona. Las mismas acusaron no haber sido escuchadas ante la decisión de la justicia de no abrir un proceso de participación ciudadana.
Este conflicto, que resurge en medio del proceso de desconfinamiento en la comuna, ha puesto mayor tensión en una zona donde el crecimiento habitacional se caracteriza por la alta inversión privada. Aun cuando existen más de 18 mil familias, ya viviendo en la comuna, sin acceso a una casa propia, según el diagnóstico del último Plan de Desarrollo Comunal.
Ante la destrucción del bosque nativo esclerófilo
Desde el Colectivo Viento Sur, uno de sus miembros y también habitante de alto Peñalolén, Eduardo Giesen, aseguró que estudian acciones administrativas para evitar la total destrucción del bosque.
«Lo que estamos defendiendo es el enorme valor en biodiversidad en términos de funciones ambientales. Retención de partículas, captura el carbono, la infiltración de las lluvias, la ventilación de la cuenca. Este bosque, más allá de su hermosura y su valor intrínseco, brinda bienestar a la sociedad en general. Además, específicamente este paño es un corredor biológico, que une la Quebrada de Macul con la ciudad«, puntualizó.
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A pesar de esto, dentro de las tres fases del proyecto, la primera sería el barrido total del espacio. Lo que amenaza con el fin de este corredor biológico. Una acción que, para el activista, sería irreparable.
Esto último, en respuesta al llamado «plan de manejo» aprobado por Corporación Nacional Forestal. El que, a modo de reparación ambiental, exige la empresa plantar una cantidad similar de árboles en Alhué. Una comuna ubicada a 138 km del lugar del conflicto.
El falso dilema por la pobreza o el medioambiente
La construcción de casas en el territorio natural del bosque nativo esclerófilo de Peñalolén trae a colación varias preguntas. Una de ellas es cómo aporta este proyecto inmobiliario a generar un crecimiento armónico de la ciudad.
Al respecto, el académico de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Chile y ex presidente del Colegio de Arquitectos, Alberto Texido, afirmó que hoy las ciudades con mayores índices de calidad de vida buscan la armonía y sustentabilidad. Algo que va de la mano con la consolidación de espacios públicos que disminuyan tiempos de traslado.
En este sentido, la edificación inmobiliaria en sectores como alto Peñalolén «implica una pregunta sobre hasta dónde llegar con eso para consolidar la ciudad que ya existe y lograr en ella más integración, sustentabilidad en términos de contaminación o tiempos de traslado, volúmenes de traslado, cercanía de servicios. Y no segregar socialmente, como puede ser la ocupación de las periferias por bolsones de pobreza o de riqueza, que finalmente terminan no fomentando la ciudad integrada», cuestionó.
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Aquella integración ha sido puesta en tensión sobre todo en la comuna de Peñalolén, donde el problema la falta de vivienda afecta a miles de familias. Aun cuando la inversión privada en el sector de la construcción ha sido una constante en las últimas décadas.
Sobre esto, Eduardo Giesen señaló que «la legislación de la mano de un modelo social y económico neoliberal ha implantado el falso dilema de que para resolver los problemas de la pobreza hay que sacrificar el medioambiente y finalmente no resuelve ninguno. Lo que sencillamente aseguran es el lucro privado, y todo esto muchas veces escondiéndose detrás de la legítima demanda por viviendas».
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Actualmente existe un juicio abierto en el Tribunal Ambiental. Este podría revocar la resolución de calificación ambiental entregada por el Servicio de Evaluación Ambiental. No obstante, hasta que no emita una orden de no innovar, la Inmobiliaria Pocuro tiene la libertad de continuar los trabajos limpiando el terreno a usar, destruyendo 13 hectaréas de bosque nativo en una de las zonas con mayor contaminación ambiental de Chile.
Mario Gajardo / septiembre 2, 2020, (10:33 pm)
Lamentablemente, peñalolen le ha dado la espalda a la clase trabajadora y su necesidad de vivienda…tanto en la precordillera como en los terrenos de la viña cousiño macul solo se construye privilegiando el lucro..muy triste.
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