Editorial especial 24 de noviembre: el día en que morí un poquito más
Escrito por Radio JGM el noviembre 25, 2022
Cada Vista Panorámica comienza con una editorial escrita con el alma crítica de las y los reporteros de la Radio JGM. Este 24 de noviembre tuvimos un especial en el marco del Día Internacional por la Eliminación de la Violencia hacia la Mujer, comandado por el Frente de Feminismos.
Por Rocío Cerda
24 de noviembre. Fotografía tomada de CIPER.
El día que morí un poquito más… Me levanté temprano, prendí la tele y ví cómo llamaban “crimen pasional” a la muerte de una compañera. No quería amargarme tan temprano y qué con mi cara de enojo la única conclusión que se pudiera sacar era que estaba menstruando. Así que apagué la tele antes de ver algún programa, uno de los que pese a tener mucho presupuesto no les pagara lo mismo a sus conductoras que a sus conductores por un tema de género.
El día que morí un poquito más… salí a tomar micro cuando aún estaba oscuro, de camino me preguntaron por qué andaba tan solita y si quería compañía. No respondí. No lo hice porque soy una maleducada que no entiende la buena onda de la gente, no porque iba tiritando y, de haber querido pronunciar palabra mi voz se hubiera quebrado por el miedo.
El día que morí un poquito más… Me fui de pie en la micro porque iba llena, en más de una ocasión sentí un contacto físico innecesario. No dije nada. No lo dije porque es normal que estas cosas pasen en el transporte público, no porque rodeada de gente me sentí más sola que nunca y no supe qué hacer.
El día que morí un poquito más… llegué al trabajo entre halagos por atreverme a mostrar las piernas usando falda y entre explicaciones de mis compañeros sobre un tema que yo dominaba mejor que ellos, pero los escuché con atención como si realmente no supiera o me importara.
El día que morí un poquito más… escuché como aquellos que conocía juzgaban y denigraba cuerpos de otras mujeres y los escuché en silencio mientras las inseguridades reunían fuerza y ganaban la batalla que nunca fue justa.
El día que morí un poquito más… compartí la ubicación cuando regresaba a casa, caminé rápido y con miedo, me arme de valor para pasar por esa calle, exhale el aire que contenía cuando cerré la puerta y escribí un «ya llegué».
El día que morí un poquito más… Chile ya llevaba 44 feminicidios en el año, los derechos de niñas y mujeres se seguían vulnerando alrededor del mundo, sobre nuestros cuerpos legislaban otros, nuestros gritos seguían siendo silenciados y nuestras almas continuaban rotas.
El día que morí un poquito más… los acosadores, abusadores y violadores seguían mirándonos detrás del cristal, frente al espejo y entre recuerdos.
El día que morí un poquito más… Me molestó ver las noticias, pero al menos las pude ver mientras otras ya no tenían ojos. Me dolió escuchar a conocidos opinar de cuerpos mientras que otras crecieron bajo la rutina de ser juzgadas en casa. Me dio miedo caminar de noche, mientras otras nunca llegaron. Alguien recibió mi mensaje mientras que otras nunca lo pudieron enviar.
El día que morí un poquito más… yo solo morí un poquito más, algunas murieron mucho más y otras simplemente murieron. A pesar de eso, me fui a dormir con la esperanza de al día siguiente morir un poquito menos.
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