Diamela Eltit sobre despertar feminista: «La masculinidad del sistema fracasó»
Escrito por Patricio Baeza Cooper el junio 28, 2018
En el marco del conversatorio «Feminismos, cultura y sociedad», la profesora explicó que la reciente ola de feminismo se da en un contexto de desplome de las instituciones más controladoras del cuerpo de la mujer: los partidos políticos, la Iglesia y los Carabineros.
La psicóloga Kena Lorenzini, la escritora Diamela Eltit y la doctora en literatura Patricia Espinosa, analizaron el movimiento feminista actual, la invisibilidad del género y el colonialismo patriarcal. La mesa de diálogo comenzó con las apreciaciones a la distancia, de la dramaturga y actriz Camila Le Bort, actualmente residente en Estados Unidos. La artista indicó que «como estamos invisibilizadas, no conocemos a todas las mujeres geniales que hay y este tipo de encuentros ayuda a fomentar eso».
Esta invisibilización de las creadoras ha dificultado que ellas puedan ganarse un espacio dentro de la esfera creativa. Según un estudio del Observatorio de Políticas Culturales (OPC) del 2014, solo un 6% de las mujeres trabajadoras de la cultura se dedica a la literatura.
Le Bort señaló: «Me he preguntado cuando va a ser el día en el que no necesitemos que haya un festival de dramaturgia de mujeres. Ojalá fuera pronto, pero hasta entonces hay que mantener estos espacios en donde se visibilizan problemas».
Diamela Eltit
La escritora Diamela Eltit, única mujer que se encuentra entre los favoritos para ganar el Premio Nacional de Literatura, sostuvo que las mujeres durante toda la historia han escrito tanto como los hombres, por lo tanto existen «líneas de paridad».
Sin embargo, enfatizó en que la invisibilización ha logrado ocultar estas líneas y a estas mujeres. Así por ejemplo, mencionó a la escritora Rosario Orrego, que por su género quedó relegada a un segundo plano ante el escritor contemporáneo Alberto Bless Gana.
Eltit señaló que «hay que mirar el espacio a donde llegan las mujeres y hay que ver como administran esa mirada, y la reformulan».
Sobre el feminismo actual, la profesora analizó el contexto en el que se produjo. Explicó que las movilizaciones se generaron hoy, en primer lugar, porque hubo un desplome de las instituciones más controladoras. Y en segundo lugar, por el hecho de que exista gratuidad pues es un recuerdo de los movimientos sociales. «Estoy entusiasta, la masculinidad del sistema fracasó», destacó.
Pero además, la escritora reconoció que uno de los grandes méritos de este movimiento, es que consiguió instalar la palabra «feminismo» en el imaginario fuera del rechazo. Al punto de que «todos somos feministas».
Sin embargo, Diamela Eltit llamó a tener cautela frente a los intentos de apropiación y negación de los significados más propios del feminismo, por parte de algunos sectores autoproclamados «feministas».
Por otro lado, se preguntó: «¿por qué de después de tantas revoluciones, en las que las mujeres han ocupado un lugar tan complejo, no se ha ampliado su espacio?». La académica propuso que las mujeres están históricamente colonizadas, y contribuyen al machismo. Uno de esos ejemplos fue el desalojo de las alumnas en la toma de la Casa Central de la Universidad Católica.
Por su parte, la crítica literaria Patricia Espinosa, aseguró que «estamos colonizados por el patriarcado neoliberal. Todos hemos aprendido a ser bajo un orden patriarcal y tenemos que desandar ese camino». Ante a esto, la doctora propuso repensar la presencia de las mujeres en las bibliografías académicas e hizo un llamado a replantearse de forma crítica en la vida cotidiana.
Kena Lorenzini hizo un repaso histórico de las olas feministas que han acontecido en Chile, desde las sufragistas hasta el rol de la mujer durante la dictadura, asegurando que «la dictadura termina, en parte, por la lucha de las mujeres».
Afirmó que en esta última década existía angustia al respecto de «quién iba a tomar la posta», pero la ola feminista que llegó es de hecho más fuerte que nunca. Esto porque la nueva generación de mujeres ha perdido el miedo inconsciente que existía durante la dictadura y ha reivindicado su importancia en los movimientos sociales. Para la psicóloga, el lema está muy claro: «La revolución será feminista o no será».
Kena Lorenzini y Patricia Espinosa
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