De la historia y la crisis azul

Un nuevo súper clásico del fútbol chileno se acerca y con mayor presión llega la Universidad de Chile. Es sabido que los azules no enfrentan a su eterno rival -Colo-Colo- en el mejor momento deportivo, pero el cliché siempre reza que «los clásicos se juegan de otro modo».

Y es que la crisis azul, según mi teoría, tiene varios procesos o hitos en los que podemos entender porqué la U hoy está en zona de descenso y con déficit económico. El ejercicio que haremos es viajar junto a la campaña azul a través del tiempo, luego de la Sudamericana 2011 para esclarecer los hitos que desencadenan lo que vemos en el presente en las oficinas de Avenida El Parrón y en la cancha fin de semana a fin de semana.

Mr. President

El 11 de abril de 2012, José Roberto Yuraszeck Troncoso asumía la testera de Azul Azul, la concesionaria a cargo de la Universidad de Chile, luego del exitoso paso de Federico Valdés por el puesto. Yuraszeck llegaba al cargo con un extenso patrimonio económico, producto de la venta de Eduardo Vargas al Napoli y el premio por la Copa Sudamericana 2011, dinero que estaba destinado para la construcción del tan anhelado estadio propio.

Incluso, el 23 de diciembre de 2011, el portal español Mundo Deportivo afirmó la cantidad de dinero que sería destinada para la realización del coloso azul. La historia ya es conocida y después de ocho años de la mágica noche en el Estadio Nacional, la Universidad de Chile sigue sin estadio.

A pesar de la promesa de Federico, Yuraszeck permitió la venta de jugadores importantes en el andamiaje azul, como fue el caso de Marcos González que partió a Brasil, Gustavo Canales a China y el ya mencionado Eduardo Vargas que emigró al Calcio.

Recordado será siempre por reemplaza a hombres importantes con nombres como los de Eduardo Morante, Ezequiel Videla o Luciano Civelli. El primero, el refuerzo más caro -hasta ese momento- que la U conseguía y que no mostró nunca el valor que se pagó, ya que el ecuatoriano tuvo poca participación con el cuadro laico debido a una lesión.

El 7 de abril de 2014, José Yuraszeck se iba del alto cargo en la U, incluso vendiendo sus acciones al mayor benefactor del equipo laico: Carlos Heller.

Con la promesa incumplida de tener el estadio propio y estar en el inconsciente de todos la manera en la que se gastó el dinero destinado para el sueño, Yuraszeck cerró de la peor manera su mandato.

 

Escucha la edición especial de ‘Hinchapelotas’, a propósito del Súper Clásico #186 entre Colo Colo y la Universidad de Chile:

 

La era de Heller y Beccacece

Carlos Heller Solari siempre se ha declarado hincha de la Universidad de Chile. A pesar de que puede ser cierto o no su amor por los colores, bajo sus órdenes se gestaron las peores decisiones en cuanto a lo dirigencial. Con promesa de construir el estadio, Heller intento conquistar a la hinchada, pero ese discurso ya se había utilizado y se convirtió en persona non grata para Los de Abajo.

Durante los últimos meses de 2015 comenzó a circular el rumor de que Sebastián Beccacece podría hacerse cargo del primer equipo, a pesar de que aún se mantenía en sus funciones Martín Lasarte. Beccacece, muy querido por la fanaticada azul, ya que había sido el fiel escudero de Jorge Sampaoli en la gesta del tricampeonato y la Sudamericana. Finalmente, los rumores fueron ciertos y cesaron de sus funciones sin argumento mayor a Lasarte para que ‘Becca’ hiciera sus primeras armas como técnico en la U. Horrenda decisión, que además marca otro de los hitos que tuerce el destino azul.

La campaña del ex ayudante de Sampaoli fue paupérrima y terminó siendo reemplazado por la dupla compuesta por dos históricos jugadores azules: Víctor Hugo Castañeda y Luis Musrri, a quienes tampoco les fue de mejor manera. ¿Una dupla técnica? Otro error de Azul Azul.

Año nuevo y técnico nuevo. En 2018 Ángel Guillermo Hoyos llegaba al Centro Deportivo Azul para dirigir al León, pero su estadía tiene un hito justo en su final. El creyente técnico argentino que le dio la estrella 18 a los universitarios saldría de la banca luego de ser apabullado por Cruzeiro 7-0 en Copa Libertadores y la dirigencia supo que ese era el momento de que su cabeza rodara, apresurando lo que hoy podría ser un proceso, ya que Hoyos es el último técnico que acumula más partidos desde 2017.

Frank Darío Kudelka llegaba con el cartel del mejor técnico en la Liga Argentina, título que no pudo revalidar en nuestro país, ya que no acumuló ningún título con los laicos. El conflicto se produciría durante el verano de 2019, cuando el cordobés pidiera una serie de nombres para reforzar a los azules, y ninguno de esos nombres se cumpliera.

Fue una cuenta regresiva la salida de Kudelka, quien el 13 de marzo a medio día abandonó el Centro Deportivo Azul. Un día antes, Alfredo Arias, -conocido en Chile por su paso por Santiago Wanderers- había llegado a la capital y ya era el nuevo técnico del Romántico Viajero.

En una nueva mala acción de la dirigencia, el uruguayo llegaba al banquillo con una credibilidad por el piso, y esa misma hizo que nunca, jugadores ni público, le consideraran. El charrúa dejó a la Universidad de Chile en zona de descenso y terminó siendo removido del cargo.

El hombre que hoy intenta sacar a los azules del pozo es Hernán Caputto, ex portero de los laicos entre 2006 y 2009. Con un triunfo, cuatro empates y una derrota, Caputto llega con «la responsabilidad» de ganar luego de 18 años en el Estadio Monumental y rescatar a la U del descenso en el que se encuentra hoy.

Veremos si los azules logran salvarse en lo que resta de torneo, o finalmente terminan condenados por los errores de quienes han comandado la dirigencia luego de tocar el cielo con las manos.