Ana Luz Ormazábal, dramaturga: «se debe seguir pavimentando el camino para las creadoras»

Escrito por el junio 20, 2018

Hoy se iniciará el ciclo «Mujeres en escena», un encuentro donde las artistas discutirán sobre los roles de género, el feminismo, el teatro y la creación. En esta oportunidad, se harán presentes las directoras Manuela Oyarzún, Aline  Kuppenheim y Ana Luz Ormazábal.

Tres mujeres que se han destacado en la escena teatral chilena, se reunirán para conversar sobre su quehacer y sobre el movimiento feminista. La actriz, directora y dramaturga, Manuela Oyarzún, quien es fundadora de la compañía de teatro «El Hijo» y que ha sido premiada como Mejor Actriz en el Festival de Biarritz por su actuación en “La Buena Vida” (2008), película dirigida por Andrés Wood, demuestra así parte de la trayectoria que ha desarrollado a lo largo de su carrera.

Por su parte, Aline Kuppenheim ha participado en recordadas teleseries como “La Fiera” (1999) y “Destinos Cruzados” (2004), además de su destacada actuación en la película “Machuca” (2004) y en la exitosa cinta “Una Mujer Fantástica” (2017). La actriz también ha dirigido las obras “Sobre la cuerda floja”(2010) y “Feos” (2015).

La fundadora de ANTIMÉTODO, Ana Luz Ormazábal, se desempeña además como directora, investigadora escénica y docente de la Escuela de Teatro de la Pontificia Universidad Católica de Chile e imparte el ramo de Actuación en la Escuela de Teatro de la Universidad de Chile. Su carrera artística la ha desarrollado a través de obras como “Tocopilla está en Chile” (2010) y “Chola Colérica” (2010), donde participó como actriz y además estuvo a cargo de la dirección de  “Concierto” en el año 2012.

Ormazábal conversó con Radio JGM y profundizó acerca de los temas que abordarán durante este encuentro. Señaló que dado a la contingencia que se está viviendo en torno al movimiento feminista, “es obvio que se hablará de la tensión de ser mujer haciendo teatro, ser directora y ocupar esa posición que históricamente ha sido más de los hombres. Además, de cómo vemos los cambios que están sucediendo hoy a partir de este levantamiento”.

¿Qué lugar están teniendo actualmente las mujeres en el teatro chileno?

Creo que hay muchas creadoras hace rato. Pero falta que ocupen lugares en la academia, en las direcciones de las escuelas de teatro, que ha pasado pero muy poco como en la Universidad Católica. En los teatros hay mujeres creadoras y artistas, y cada vez tenemos más visibilidad. Hay gente que ha pavimentado eso para nosotras. Estamos en una sociedad más abierta, pero siempre debe ser más en términos de la teoría, de la bibliografía, entre otras cosas.

En relación a lo laboral, ¿han mejorado las condiciones ante la brecha salarial entre mujeres y hombres?

En las compañías de teatro no hay diferencias de género en los sueldos. Eso no ocurre. El teatro es muy pobre y para los artistas en general. Pero en las compañías no pasa que se sepa que a alguno le paguen más por ser hombre, porque somos personas que no pensamos de esa manera. En las universidades en las que he trabajado, tampoco he visto diferencia de sueldo por género.

¿Cuál es su postura frente al movimiento feminista?

Yo soy feminista, apoyo cien por ciento al movimiento. Creo que hay un cambio de paradigma que está sucediendo y me parece que las alumnas, alumnos y “alumnes” que están haciendo esto, nos están enseñando una gran lección, a decir “basta” a millones de abusos patriarcales de todo tipo. Actitudes que yo misma había normalizado, o no me paraba frente a alguien a decirle que no hiciera ciertas cosas, y en cambio ellos no tienen miedo decirlo.

Esto me parece muy interesante. Los hombres estén cambiando, los alumnos de 20 años de la escuela, todos están con una mirada muy integral. Me parece que a futuro eso es muy bueno para toda la sociedad. Están derribando muros súper fuertes y yo espero que esto siga, hasta que nosotras no seamos vistas como algo distinto por el hecho de ser mujeres.

Las manifestaciones que están teniendo las jóvenes son bastante performáticas, vemos acá una suerte de relación o influencia desde el teatro. ¿De qué forma las artes escénicas contribuyen en defensa de los ideales feministas?

El teatro tiene que ver con el rito y de ahí nace toda acción, que se remite a esta manifestación colectiva. Lo que sucede en las marchas tiene que ver con un ritual civil muy importante y es una gran performance de detenerse, de no ir a trabajar y de ir a marchar, y de manifestar de manera simbólica y semiótica un malestar.

En el teatro también hacemos eso, por lo que no es una influencia sino que viene de la misma raíz de lo que ellas están haciendo. De esta cosa colectiva, comunitaria de manifestar sensaciones, deseos, ideas y hacer preguntas. Y eso es de lo que el teatro está hecho, es su base. Lo que estamos viendo en las calles es la gente haciendo ritos colectivos, para mostrar su descontento. Es distinto hacerlo en Facebook o mandar una carta. Lo interesante es ver a toda esa cantidad de personas, sentirla, estar en el presente y en la co-presencia con otros, te da otra perspectiva y empiezas a leer otras cosas. Es hacer una experiencia compartida y eso es teatro.

En relación a esto, se ha visto que la forma de manifestarse de las feministas ha causado molestia en los sectores más conservadores. ¿Qué opina de esas reacciones? 

Chile es un país muy conservador y muy aburrido. Entonces, no me sorprende para nada que la gente moleste con eso. A mí no me importa, yo creo que hay que seguir haciéndolo hasta que se acostumbren. ¿Por qué las pechugas de una mujer tienen que ser distintas a las de un hombre?

Ahí se nota la diferencia conservadora de las mujeres y los hombres en el país, y ojalá en verano las mujeres si quisiéramos andar sin polera, lo pudiéramos hacer. ¿Por qué tenemos que taparnos? Y eso también es injusto. ¿Por qué ellos se pueden excitar con lo que ven? Es un problema como que fuera nuestro, la incapacidad del hombre de controlarse. Eso me parece nefasto, machista. Apoyo cien por ciento lo que se está haciendo y creo que mientras más se haga, los abuelitos, los papás y todas las personas estarán dispuestos a cambiar su postura y finalmente se acostumbrarán.

Pasando a otro tema, en torno a la escena artística en general en Chile sabemos que  está en desventaja en relación a Europa y Norteamérica. ¿Crees que el panorama ha mejorado con respecto a años anteriores?

Creo que el arte en el mundo está en desventaja hoy día. O sea, hay más desarrollo en Europa, en Estados Unidos, pero siempre hay una deuda. Es una situación global, que es mejor que hace mucho tiempo. Pero me da miedo los gobiernos de derecha que están saliendo en todo el mundo, que son más conservadores como en Rusia, Estados Unidos, en Alemania y nosotros ahora con Piñera.

Este cierre de los gobiernos conservadores a las oportunidades artísticas, se da porque ellos ponen al arte en un espacio de entretenimiento o de tradición, cuesta que se abran para la experimentación. Creo que Chile este año está peor, el FONDART tiene menos plata. Los fondos para los viajes se acabaron inmediatamente, no hay mucha plata en los teatros. Ha bajado el aporte económico del Estado y del privado al artista. No estamos en un panorama muy bueno. Sí creo que el escenario político es interesante, de donde van a surgir muchas cosas interesantes. Espero que mejore y todos estamos trabajando para eso, pero mientras la cultura no sea vista como un derecho humano dentro de las políticas estatales, no va a cambiar mucho la cosa.

Con la creación del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, ¿se han visto algunas mejoras o es muy pronto para saberlo? 

Creo que es muy pronto y que hay una posibilidad interesante, que es que la cuestión entre en la agenda pública de manera importante. Como en otros países donde se valora que cada ciudad tenga su teatro, con un elenco. Ahí se le da una gran relevancia a este tipo de experiencia y la gente dona plata, porque ahí el arte es valioso. Y acá no existe mucho, el arte es muy élite o se ve como una cosa de mero entretenimiento.

Ojalá que el ministerio aporte a complejizar la discusión en torno al arte dentro de la sociedad y no a parte de ella. Eso espero que suceda. Hay muchos tipos de arte, como el experimental, que es como más de nicho, pero hay arte comunitario y de todo tipo. Hay que abrirse a estas otras formas.

¿Qué idea propondría usted para inculcar el arte desde la raíz?

Creo que las prácticas sensibles tienen que estar presentes en la formación en todos los colegios. La danza, el teatro, la música y la pintura son disciplinas que todos los niños debiesen conocer, pues te conectan con tu cuerpo, con otro tipo de inteligencia, con los otros y que te ayudan a tu desarrollo humano. Yo creo que no puede ser un lujo de algunos, sino que deben estar en la educación desde los primeros años, porque es un derecho para todos vivir experiencias sensibles y particulares.

Finalmente, Ana Luz Ormázabal invitó a asistir a este conversatorio señalando que será muy interesante conversar con sus compañeras y que “justo se da en un momento histórico del movimiento feminista y será muy bonito entrar a ese teatro, y que nosotras hablemos y podamos tensionar algunas cosas, donde se cuestionará la tradición de macho dueño de la verdad”. Lo que para ella será una experiencia interesante y provocadora.

El ciclo de conversatorios “Mujeres en escena” comenzará este miércoles 20 de junio a las 19:30 horas, en el Teatro Nacional Chileno ubicado en Morandé #25. La próxima fecha será el 11 de julio, donde conversarán las dramaturgas Nona Fernández, Manuela Infante e Isidora Stevenson, para retomar en agosto con diseñadoras y actrices. La entrada es liberada y sin inscripción previa.

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